Tienen tus ojos Madre !tánta bondad!
que al mirarlos me lleno de gozo,
me innundo de Paz.

Mensajes y Apariciones de María

María, nuestra Madre, nunca se olvida de sus hijos en la tierra, y siempre llega a nosotros con mensajes que los expresa en sus Apariciones.
En sus Mensajes, nuestra Señora siempre nos  anima a orar y hacer penitencia para la conversión de los pecadores y para que en esta vida el Amor de Dios se manifieste entre los hombres.
 Una de sus apariciones se realizó en Amsterdan  entre 1945 y 1959 a una humilde mujer Ida Peederman, revelandole que quiere ser conocida y amada como "La Señora de todos los Pueblos" . En sus mensajes María  revela el Plan de Dios para salvar al mundo. para eso ofrece una imagen y una oración.  

La imagen representa a María de pie sobre el globo penetrada por la luz de Dios, delante de la Cruz de Jesús con quien está inseparablemente unida. De las manos de María descienden tres rayos(Gracia, Redención y Paz) que concede a cuantos le invocan como Abogada. El rebaño representa a los pueblos de toda la tierra que no hallarán descanso hasta que no levanten la mirada hacia Jesús.
En su mensaje la Señora nos dice:

" Ustedes pueblos de este tiempo, sepan que están bajo la protección de la Señora  de todos los Pueblos! Invóquenla como su Abogada, pídanle que aleje todas las calamidades! ¡Pídánle que elimine de este mundo la corrupción. De la corrupción vienen las calamidades, de la corrupción vienen las guerras. Tienen que  pedir por medio de mi oración que todo esto sea eliminado de este mundo!. Ustedes no saben lo grande e importante que esta oración ante Dios."

Como vemos la oración que María nos hizo entrega es otra "herramienta" más para traer al mundo la Unidad y la Paz. También Ella nos recomienda recitar esta oración por lo menos una vez al día y difundirla.

Señor Jesuscristo, Hijo del Padre
manda ahora tu Espíritu sobre la Tierra
Haz que el Espiritu Santo
habite en el corazón de todos los pueblos
para que seamos preservados de la corrupción de las
calamidades y de la guerra,
que la Señora de todos los Pueblos
que un día era María
sea nuestra Abogada.
Amén.